La exalcaldesa de Playa del Carmen, Lili Campos, está más cerca de Morena de lo que muchos imaginaban.
Del equipo compacto del exgobernador Carlos Joaquín, Lili Campos llegó como diputada local y presidenta municipal arropada por el PAN y PRD, aunque siempre negó ser militante de esos partidos.
Incluso hubo quienes la identificaban con el PAN, sobre todo porque adoptó el color azul como oficial en el Ayuntamiento, al punto de emplearlo en señales de tránsito.
Hace unos meses, intentó reelegirse, esta vez bajo la alianza PAN-PRI, pero en el municipio playense se impuso la maquinaria Morena-PVEM, que domina todo el estado.
Tras su derrota, la exalcaldesa optó por no asumir el cargo de regidora de representación proporcional, y luego de la instalación del Ayuntamiento, el pasado 30 de septiembre, desapareció de la política activa.
Aunque mantuvo presencia en redes sociales, no daba pistas claras sobre su futuro político. Sin embargo, en la Ciudad de México ya ha dado señales de su nueva etapa.
Monreal y Haces
En días recientes, se le ha visto en distintas reuniones de trabajo en la Cámara de Diputados con el grupo asesor de Morena. También asistió a la toma de protesta de Pedro Haces como secretario general de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), así como a la ceremonia de investidura de Eduardo Ramírez como gobernador de Chiapas, ambos relacionados con Morena.
Además, ha llamado la atención su cercanía con la diputada federal de Zacatecas, Julia Olguín, según consta en sus redes sociales.
Lili Campos estaría encontrando acceso a la 4T a través de Ricardo Monreal, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) y un peso pesado de Morena, así como de Pedro Haces, líder del sindicato preferido de la 4T.
Por cierto, Monreal y Haces han mostrado tener intereses importantes en Quintana Roo y vínculos con personajes locales afines a la 4T, como la diputada federal Marybel Villegas y el alcalde de Tulum, Diego Castañón.