Redacción
CHETUMA.- Los legisladores Hugo Alday, Diana Gutiérrez y Rubén Carrillo, integrantes del grupo legislativo del Partido del Trabajo en el Congreso de Quintana Roo, presentaron una iniciativa para reformar la Ley de Educación del Estado. La propuesta busca añadir un párrafo al artículo 77, con el objetivo de incluir en la legislación medidas de capacitación sobre salud mental para el personal docente y administrativo de las instituciones educativas.
La propuesta legislativa subraya la creciente preocupación por la salud mental de niñas, niños y adolescentes en el estado, especialmente debido al incremento en problemas de ansiedad y depresión entre los estudiantes. Los legisladores argumentan que el entorno escolar es un espacio crucial para identificar y atender de forma temprana estos problemas, considerando el papel que juegan docentes y personal administrativo en la vida cotidiana de los estudiantes.
En el marco de esta reforma, la Secretaría de Educación, en coordinación con la Secretaría de Salud, sería responsable de implementar programas de capacitación en salud mental. Estos incluirían cursos, diplomados y seminarios dirigidos al personal educativo, para dotarlos de herramientas que les permitan reconocer señales de problemas de salud mental en los alumnos y actuar oportunamente.
La iniciativa resalta que las problemáticas de salud mental en estudiantes se han intensificado tras la pandemia de COVID-19, reflejándose en casos de depresión y, en ocasiones, suicidio. Según datos del Programa Nacional de Prevención del Suicidio, este problema se ha convertido en una de las principales causas de muerte en jóvenes de entre 15 y 29 años, por lo que se considera urgente atenderlo desde el ámbito educativo.
Finalmente, los legisladores puntualizan que esta iniciativa representa un primer paso para reducir la brecha de atención en salud mental en Quintana Roo, donde los recursos especializados son limitados. La propuesta legislativa enfatiza que, al capacitar a quienes están en contacto diario con los estudiantes, se espera una intervención más temprana y eficaz en el cuidado de la salud mental infantil y juvenil.